Ambas entidades se han unido para crear un nuevo vínculo. Esta fusión deja paso a cuatro nuevos conjuntos en las categorías preinfantil e infantil, con dos grupos en cada nivel: Joan XXIII-Salou para los pequeños y, a la inversa, para los mayores. Los jugadores son de ambos organismos, aunque únicamente están inscritos en el Club de Baloncesto Salou. Los entrenamientos se reparten entre las dos instituciones, de forma que cada niño entrena dos días en su pabellón habitual y uno en las instalaciones del otro. Ainhoa Rodríguez, coordinadora del CB Salou, ha insistido en que «la Escuela Joan XXIII y nosotros tenemos una filosofía de trabajo muy parecida y, por eso, consideramos que tanto los valores suyos como los nuestros son afines».
Nuevos equipos de cara a los próximos años
Esta vinculación debe ayudar a que, en un futuro, las siguientes categorías de jugadores de la Escuela Joan XXIII y del CB Salou también estén asociadas al actual convenio. La coordinadora del club ha destacado la importancia de este vínculo: «Como ambas entidades teníamos que sacar dos equipos, pensamos que lo mejor era hacer esta fusión».
«La Escuela Joan XXIII y nosotros tenemos una filosofía de trabajo muy parecida y, por eso, consideramos que tanto los valores suyos como los nuestros son afines»
Ambas organizaciones han diseñado una equipación exclusiva para las formaciones con los colores de ambos equipos: el azul y amarillo, junto con los dos logos en la camiseta. La nueva indumentaria deportiva puede adquirirse en el club.